Desde
que era niña, recuerdo que cuando alguien de la familia, tenia un dolor de
estomago, de cabeza, o cualquier otro tipo de dolor; mi mama y abuela, siempre
nos ofrecían una infusión de alguna planta que ellas conocían muy bien, calmado
así los molestos dolores. Los llamados remedios
caseros son considerados por muchos efectivos, además de ser económicos
y con menos efectos secundarios que las medicinas.
Dentro
de la amplia gama de plantas que utilizamos para aliviar los dolores cotidianos
de tu familia, te daremos una pequeña guía que puedes utilizar teniendo en
cuenta el tipo de dolor o problema de salud.
En
China, Pakistán, países de sur América los tratamientos a base de plantas
medicinales ocupan un lugar muy importante.
El
aporte de estas plantas para la creación de nuevos medicamentos es infinito
como los productos vendidos en las tiendas naturistas.
Los
principales métodos para preparar los remedios caseros son:
Cocción: Es
el método mediante el cual cocinamos a fuego bajo las hierbas o flores hasta
que hierva, para luego colar y consumir la bebida resultante.
Infusión: Dejar
1 cucharadita de las hierbas secas en 1 taza de agua hervida por un espacio de 15 minutos aproximadamente si
son flores y hojas y 30 minutos si se trata de raíces o tallos, dejar tapada
por este termino de tiempo, se recomienda colar la infusión antes de ser
bebida.
Maceración: Se
machacan las hierbas y se ponen en la zona afectada. Este procedimiento sirve para
extraer las propiedades máximas de la planta.
Jarabes:
Para preparar el jarabe necesita añadir a una maceración miel en la misma
cantidad.
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